Resonancia magnética neurológica

La resonancia magnética neurológica, disponible a través de Atlantic Health System Neuroscience, utiliza un campo magnético y pulsos de energía de ondas de radio para producir fotografías y películas de órganos y estructuras dentro del cuerpo. En muchos casos, la resonancia magnética proporciona información que no se puede obtener con una radiografía, ecografía o tomografía computada.

Durante una prueba de resonancia magnética, el área del cuerpo que se está estudiando se coloca dentro de un fuerte campo magnético. La resonancia magnética puede detectar cambios en la estructura normal y las características de los órganos u otros tejidos causados por traumatismos, infecciones, inflamación o tumores. La información de una resonancia magnética se puede guardar para su posterior estudio. En algunos casos, se puede usar un tinte durante la resonancia magnética para mejorar las imágenes de ciertas estructuras. El material de contraste puede ayudar a evaluar el flujo sanguíneo, detectar algunos tipos de tumores y localizar áreas de inflamación.

La resonancia magnética puede diagnosticar una amplia variedad de afecciones neurológicas, que incluyen:

Anomalías de cabeza y cuello

• Tumores cerebrales, aneurismas, sangrando en el cerebro, esclerosis múltiple, accidente cerebrovascular o procesos infecciosos
• Problemas del nervio óptico (ojo) y la glándula pituitaria
• Enfermedad en las glándulas parótidas, laringe, glándula paratiroidea
• Vértigo y pérdida de audición, neuroma acústico y tumores benignos del conducto auditivo interno
• Anomalías congénitas

Columna vertebral

• Estenosis espinal
• Protuberancias y hernias de disco
• Tumores de la columna vertebral y anomalías de los vasos sanguíneos